Entre los múltiples matices de la crisis hídrica que hemos vivido en México a lo largo de este año, uno de ellos lleva siendo un problema desde hace más tiempo de lo que parece: la demanda por el agua potable embotellada.
México es el país #1 del mundo en el consumo de agua embotellada debido al poco acceso a agua potable en el país, lo cual da pie a una cantidad enorme de residuos innecesarios. La mayoría de las personas en México consume agua en garrafones, lo cual puede ser un riesgo para la salud debido a los métodos de sanitización de los mismos y la clase de bacterias que pueden permanecer.
Dentro de esta demanda y problemática surge Ecofiltro, una compañía que prima por la accesibilidad al agua potable para todos, al mismo tiempo que ataca directamente el problema del exceso de consumo de agua embotellada.
Eco filtro y su causa social
Conversamos con Claudio Cervantes (Director de Comunicación de Ecofiltro) y Arturo Zavaleta (Director de Ecofiltro) quiénes nos contaron un poco más de sus productos y el trabajo de su empresa. Ecofiltro surgió como una innovación del Ing. Fernando Mazariegos ante la búsqueda de soluciones para mejorar la calidad de vida de comunidades en Guatemala, haciendo frente a los desafíos del acceso al agua potable y de salud que el país enfrentaba.
Al observar la dificultad en el acceso a agua potable en su país y las enfermedades que esto causaba a las familias, el ingeniero Fernando Mazariegos se dio a la tarea de investigar y crear prototipos basados en los diferentes métodos de filtración, hasta llegar a lo que hoy es Ecofiltro; un sistema hecho de carbón activado, plata coloidal y barro.
Es así como la historia de Ecofiltro se ha convertido en un testimonio inspirador de cómo la tecnología puede ser utilizada para transformar vidas y crear un impacto positivo en las comunidades más vulnerables.
Alineados con el Objetivo de Desarrollo Sustentable #6 de la ONU (Agua limpia y saneamiento) Ecofiltro busca facilitar el acceso a agua potable a todas las personas y que al mismo tiempo puedan contar con un producto que no requiere electricidad ni mantenimiento.
Lo único que hay que hacer es cambiar el filtro por uno nuevo (que se asemeja a una maceta de barro) cada 2 años. Que además, el filtro anterior se puede reutilizar como maceta. Incluso se puede dejar en el jardín para que se desintegre, ya que es barro y con el pasar del tiempo se hará polvo sin contaminar el ambiente. Este sistema no requiere de mantenimiento ni instalación.
La tecnología utiliza un filtro con carbón activado y plata coloidal que replica el filtrado natural del agua y se purifica convirtiéndose en agua potable. Existe una amplia variedad en términos de capacidad, diseño y precio.
Este producto intenta ser versátil, accesible y a la vez ahorrador: “Una familia de 4 personas puede llegar a gastar más de $15,000 pesos al año en garrafones” nos comentó Claudio. Y lo peor de todo es que es altamente probable que estos garrafones estén contaminados, ya que, según los datos que Claudio nos compartió, aproximadamente 8 de cada 10 garrafones en la Ciudad de México están contaminados.
Al mismo tiempo, Claudio nos comenta que lo que más distingue a Ecofiltro como compañía es el “balance entre la parte ecológica y comercial”. La compañía ha tenido un enfoque importante en la distribución y donación de agua limpia y potable desde sus inicios.
Una de sus campañas más importantes ha sido la de Red Refill apartado en Puerto Escondido, Oaxaca. En esta campaña se colocaron varios Ecofiltros en la avenida principal de la ciudad, al igual que en comercios locales, para que las personas pudieran tener acceso al agua potable sin necesidad de comprar botellas, lo cual redujo considerablemente el consumo de botellas desechables.
También trabajan con un número de fundaciones a nivel nacional que regalan el producto en diferentes comunidades marginadas para que puedan facilitar el acceso al agua potable. Claudio nos compartió que existe un área dentro de la empresa dedicada exclusivamente a estas colaboraciones para poder lograr de manera conjunta el llevar agua potable a las comunidades que la necesitan.
Él mismo considera que esta es una de las labores más importantes de la empresa. Al mismo tiempo, Arturo Zavaleta (Director de Ecofiltro) considera que “acercar a la gente a un filtro funcional, viable y económico para que te puedas olvidar del garrafón y tener acceso a agua potable ya tiene un fin social directo e intrínseco”.
Ecofiltro y la conservación del medio ambiente
Arturo nos compartió también cómo una de los objetivos importantes de Ecofiltro es la reducción de desechos y emisiones, limitando así también el uso de plásticos de un solo uso como lo es el PET.
Desde reducir las emisiones que resultan de la distribución de garrafones, hasta limitar los plásticos de un solo uso, es un impacto claro que Ecofiltro tiene en la huella de carbono. Al utilizar el Ecofiltro se evitan los plásticos en su totalidad (más allá de si se reusan o no) y no es necesario disponer de recursos para poder disponer del plástico ya usado.
En palabras de Arturo “hacemos ecologistas a los que no les interesa la ecología”, refiriéndose a quiénes no abogan necesariamente por esta causa pero terminan haciendo un impacto positivo en ella al comprar el producto.
Tal es el caso del Hotel Howard Johnson en Huatulco, que desde que empezaron a usar Ecofiltro generan menos basura de botellas de plástico y como consecuencia han podido dejar de pagar multas de excedente de basura al municipio.
Y finalmente, a pesar de que muchas veces parezca que el problema ambiental es demasiado grande para poder hacer algo para reducirlo, existen muchas acciones positivas que podemos tomar y que tendrán un impacto real y visible. Y tal es lo que nos demuestra Ecofiltro con su labor social y ambiental, y cómo termina haciendo aliados de la causa tanto a aquellos que la buscan directamente como aquellos que lo terminan haciendo como consecuencia de la practicidad.
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