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AJEMEX ha reafirmado su compromiso ambiental, apostando por un enfoque que combina restauración, ciencia y educación para impulsar la protección del jaguar y los territorios que necesita para subsistir.
Considerado una de las especies más representativas de la biodiversidad latinoamericana, el jaguar continúa siendo un referente de fuerza, equilibrio ecológico y patrimonio natural.
En México, este felino ocupa una posición clave como depredador tope, regulando poblaciones de presas y manteniendo la salud de los ecosistemas donde habita; sin embargo, las alteraciones humanas han reducido su presencia, lo que convierte su conservación en un desafío prioritario.
La colaboración entre AJEMEX y Naturalia A.C., organización reconocida por su enfoque científico y comunitario, permitió desarrollar proyectos de conservación integral en zonas donde el jaguar enfrenta mayores amenazas.
Sus líneas de acción incluyeron:
Monitoreo biológico para conocer rutas, densidad poblacional y comportamiento del jaguar.
Restauración de hábitats y reforestación en áreas degradadas esenciales para los corredores biológicos.
Programas de educación ambiental dirigidos a comunidades locales, con énfasis en prácticas sostenibles.
Promoción de participación comunitaria, fortaleciendo el vínculo entre biodiversidad, cultura y desarrollo social.
Este trabajo conjunto destacó la urgencia de conservar grandes extensiones de selvas, bosques tropicales y manglares, especialmente en regiones del Pacífico mexicano y la Península de Yucatán.
Aunque el jaguar es un símbolo cultural milenario, su vida en libertad continúa en riesgo. Entre los principales factores que presionan su supervivencia destacan:
Expansión de fronteras urbanas y agrícolas.
Deforestación acelerada en zonas críticas.
Caza ilegal y conflictos derivados de la ganadería.
Fragmentación de corredores biológicos.
Estas amenazas han llevado a considerar al jaguar como una especie vulnerable en evaluaciones internacionales, lo que demanda respuestas inmediatas y sostenidas.
Para AJEMEX, conservar al jaguar implica proteger no solo a un felino emblemático, sino también la riqueza natural y cultural que lo rodea.
En su visión, cada acción —desde recuperar espacios naturales hasta sensibilizar a niñas, niños y comunidades enteras— suma a la construcción de un futuro donde la biodiversidad sea valorada y defendida.
La empresa considera que la colaboración con organizaciones especializadas es una vía esencial para generar impactos de largo plazo y promover un equilibrio entre actividad humana y vida silvestre.
Con ello, reafirma su compromiso con la preservación del jaguar, una especie que representa el espíritu mismo de la naturaleza mexicana.
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