México es el noveno productor de café a nivel mundial, y los cafetaleros están atravesando una compleja situación debido a los efectos de la crisis climática y a los incrementos en los precios. Esta situación los ha empujado a buscar alternativas para no frenar sus ventas.
La crisis climática y la inflación están teniendo múltiples efectos en diversas industrias. En México, específicamente, están provocando grandes pérdidas en la industria cafetalera; pues de acuerdo a cálculos del gobierno, más de 600 mil hectáreas de cultivos fueron afectadas durante el 2023.
Reportan pérdidas de hasta el 30%
En 2023 los sembradores de café reportaron pérdidas de hasta el 30%, de acuerdo a información del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) del Gobierno. La institución indicó que el área sembrada de café cereza cayó un 0.42 por ciento anual el año pasado, llegando hasta las 698,035 hectáreas, de acuerdo a la información replicada por EFE.
La sequía, que mantiene al 61.59 por ciento del territorio en una situación que va de moderada a excepcional, complica la situación en Chiapas, estado con la mayor producción de café. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó un 50.7 por ciento de superficie “anormalmente seca”, 22.9 por ciento con sequía moderada y 8 por ciento con severa.
La inflación también afecta a los productores de café
Los agricultores también sufren los efectos de la inflación, que cerró en 2023 con una subida general del 4.66 por ciento, y una de 5.66 por ciento en los agropecuarios. Pero aunque los consumidores también ven los efectos, consumiendo café con precios más altos, los campesinos tienen que vender el kilo de café a solo 40 pesos (unos 2.33 dólares) por las presiones de los grandes comerciantes, explicó Alonzo Gómez Pérez, indígena tzeltal, productor de café convencional.
En cuanto a las exportaciones, el café sin tostar ni descafeinar cayó un 67.37 por ciento interanual en el cuarto trimestre de 2023, tocando los 24.9 millones de dólares, de acuerdo al registro de Data México de la Secretaría de Economía.
Esto a pesar del aumento anual de 7.02 por ciento que reportó el SIAP en la producción al superar las 1.05 millones de toneladas.
La industria cafetera de América Latina es la más grande del mundo, representando el 61 por ciento de la producción global. Dada la crisis climática que afecta a la región y los diversos escenarios económicos, los agricultores abren sus mercados a los cafés especiales, una opción para hacer frente a los problemas que están sufriendo.
