El colapso de la isla del Arco de Darwin -una isla ecuatoriana ubicada en el este del océano Pacífico que forma parte del archipiélago de las islas Galápagos- llamada así por el famoso naturalista británico que desarrolló la teoría de la evolución, comenzó en 2021 y es atribuida a la erosión natural. Esto enfatiza la fragilidad del ecosistema, que lleva enfrentando una presión creciente tanto por el cambio climático como por la introducción de especies invasoras.
El alza de la temperatura de los océanos está afectando seriamente las fuentes de alimento de las especies marinas en las Galápagos. Un ejemplo de ello son las iguanas marinas, quienes tienen más dificultades para encontrar las algas rojas y verdes que prefieren, debido a las alteraciones del ecosistema marino. Estos cambios, provocados por el aumento de las temperaturas oceánicas, también afectan las rutinas de anidación y crianza de las tortugas marinas, que encuentran menos nutrientes disponibles en las aguas más cálidas.
Natasha Cabezas, guía naturalista, indicó: “Aquí tenemos un poco de todo, por eso dicen que Galápagos es tan diversa, pero tenemos una pequeña cantidad de cada cosa”. Esto deja ver la diversidad limitada, pero significativa de especies en el archipiélago, lo que aumenta la importancia de su conservación.
Un poco sobre las Islas Galápagos
Las Islas Galápagos están situadas en la confluencia de corrientes oceánicas frías y cálidas, lo cual hace que la situación sea más compleja, especialmente a causa del fenómeno El Niño: que calienta el océano Pacífico y provoca el colapso de fuentes de alimentos cruciales para especies como las iguanas marinas y tortugas marinas. Según indicó Jorge Carrión, director de Galapagos Conservancy a AP: “Estas especies han experimentado una disminución significativa de las cifras de población durante los fenómenos de El Niño“.
A medida que las temperaturas de los océanos han aumentado debido al cambio climático provocado por el hombre, el archipiélago ha experimentado impactos adicionales. En la última década, los océanos han alcanzado su temperatura más cálida desde al menos el siglo XIX, con 2023 registrándose como el año más cálido.
Las islas Galápagos y la crisis climática
Así como la crisis climática, la presencia de especies invasoras como gatos, perros, cerdos y ganado representa otra amenaza para las especies nativas de las Galápagos. Natasha Cabezas resalta un problema pospandémico, e indicó que, tras la pandemia de COVID-19, muchas personas abandonan a los perros y gatos, lo cual explica que ahora proliferen de esta forma.
Los animales que no son nativos, como los cerdos salvajes, pueden causar estragos en los sitios de anidación de las tortugas gigantes en una sola noche, según comentarios de Jorge Carrión. Los gatos salvajes también representan una amenaza, ya que se alimentan de las crías de iguanas marinas y compiten con las tortugas por los alimentos.
La contaminación por plásticos también es un desafío importante en las Galápagos. Un estudio reciente publicado en PLOS ONE encontró microplásticos en los vientres de los pingüinos de Galápagos. Carrión enfatizó que no hay animales en Galápagos que no tengan microplásticos en su comida. Esta realidad subraya la urgente necesidad de implementar medidas para reducir la contaminación, y principalmente la crisis de microplásticos que vivimos hoy en día
La biodiversidad de las Galápagos está en un punto crítico. La combinación de aumentos de temperatura, especies invasoras y contaminación marcan un futuro incierto para este archipiélago. A pesar de los esfuerzos de conservación, la naturaleza aislada y única de las especies endémicas de las Galápagos exige soluciones urgentes y eficaces para asegurar la supervivencia y la prosperidad de este patrimonio natural.
También te puede interesar: La pista de París 2024 es sustentable














