La gente en México ha olvidado a los burros, animales silvestres que han sido utilizados a lo largo de muchos años como medio de transporte para todo tipo de carga.
Y no solamente a eso se ha llegado, además ya son víctimas de abusos, incluso la gente también ha comenzado a comercializar su carne, lo cual pone a los burros en peligro de extinción.
De acuerdo con los últimos datos reportados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en los últimos 30 años, esta especie ha desaparecido más de 50%, en 1991 existían alrededor de un millón 500 mil; sin embargo, en 2007, tan sólo había 581 mil 401 burros.
Ante esta situación, Ana Ivonne Alfaro, colaboradora de Burrolandia, dijo que desde esta trinchera trabajan arduamente en su cuidado, al ver que cada vez son menos burros.
“Otumba es conocida como la cuna del burro y a pesar de ello, aquí no hay burros», aseveró.
Expuso que lamentablemente el uso más frecuente de la tecnología generó que los burros se volvieran obsoletos para la población, misma que pasó de verlo como un compañero de trabajo a prácticamente hacerlos a un lado, olvidándose de sus cuidados básicos como la alimentación, atenciones médicas, el cariño e, incluso y lamentablemente, algunos se volvieron víctimas de maltrato.
Además, “aquí en México, lastimosamente se están acabando los burros porque están comercializando su carne, porque la gente se siente menospreciada por tener un burro como medio de transporte y lo sustituyen por un vehículo automotor”.
Denunció que en el país existe una cantidad de rastros clandestinos en donde están sacrificando de forma masiva a estos animalitos. «Si nosotros lo vamos dejando así que continúe el maltrato a los animales, vamos a llegar a un punto en el que realmente no se va a poder ver físicamente a algún animalito».
De acuerdo con expertos, los burros son considerados animales bastante inteligentes, que tienen muy desarrollados tres sentidos: la vista, el olfato y sobre todo el oído, con los que pueden percibir inestabilidad, es por ello que en la antigüedad se les utilizaba para trazar caminos, debido a que, al ser extremadamente precavidos, solamente recorrían terrenos seguros.
Entre otras de las características, estos animales pueden reconocer a la perfección a sus amos, aun pasados 10 años sin verlos, expuso Ivonne Alfaro.
Burrolandia busca tanto la protección, como la conservación del burro, a través de visitas y apadrinamientos con los que obtienen ingresos para el cuidado de estos animalitos, los que en su mayoría fueron rescatados del maltrato de sus dueños.
Por último, señaló que Burrolandia está ubicado en Calle Estación 6, La Estación, 55880 Otumba de Gómez Farías, Estado de México, y hay 89 burros en resguardo y algunas burritas se encuentran encinta, de esta manera, dijo que la familia próximamente aumentará.
TE RECOMENDAMOS LEER: tala-clandestina-afecta-bosques-en-el-estado-de-mexico
Perfil del Autor
- Redacción
Ultimas notas
Cambio climático28 septiembre 2023EEUU, China, India, Rusia y Japón, los países más contaminantes del mundo
Acciones28 septiembre 2023Jóvenes portugueses claman “justicia climática”, denuncian a 32 países
Cambio climático27 septiembre 2023Hielo marino de Antártida toca un mínimo histórico
Acciones27 septiembre 2023Comisión Europea prohibirá la venta de productos con microplásticos